La tartamudez es un trastorno del habla (no del lenguaje) que puede tener un impacto emocional grave en las personas que la padecen. Se estima que el 1% de la población mundial tartamudea, pero algunas celebrities convirtieron este problema en su aliciente para superarse y llegar a lo más alto. Analicemos los casos más relevantes.
Bruce Willis y Anthony Hopkins.
Bruce Willis
El divorcio de sus padres marcó profundamente a Bruce Willis. Tanto es así que durante sus años de instituto sus problemas de tartamudez comenzaron a ser muy notorios. Debido a su trastorno, sufrió ’bullying’ y tuvo que soportar una retahíla de apodos muy desagradables. En su época universitaria, se sometería a algunas terapias para mejorar sus habilidades comunicativas y, poco a poco, comenzaría a aceptarse, convirtiéndose en el Presidente del Consejo Estudiantil y en un miembro activo del club de drama. No obstante, a día de hoy los nervios a veces le juegan malas pasadas y tartamudea, aunque "jamás" lo hace cuando actúa.
Anthony Hopkins
El mítico Hannibal Lecter tuvo una infancia complicada. Fue disléxico y, para más inri, también tartamudo. "Era muy solitario. No por decisión propia, simplemente no sabía qué decirle a la gente. Era tímido. Solía balbucear y babear", reveló en una ocasión. A los 15 años Hopkins decidió ser actor y poco después se matriculó en la Academia Real de las Artes Dramáticas, donde superaría su miedo a hablar en público.
Marc Anthony
Llama poderosamente la atención que un hombre que se gana la vida gracias a su portentosa voz fuera tartamudo de pequeño. Pero así fue. El exmarido de Jennifer López, Marc Anthony, lidió con la tartamudez durante años y se puso en manos de reputados especialistas para poder triunfar en el mundo del espectáculo. "De allí nació ese respeto que tengo por la música", contaba en una entrevista en los Billboard Latinos.
Nicole Kidman
La actriz australiana se sintió muy identificada con Jorge VI cuando vio el oscarizado biopic, ’El discurso del rey’, película que dirigió magistralmente Tom Hooper. "Yo sufrí tartamudez y recuerdo a muchas personas diciéndome: ’Piensa, organiza lo que quieres decir y luego habla", confesaba a ’Starpulse’. Su espíritu de superación fue clave para que se decantara por la interpretación y forjara una brillante trayectoria en Hollywood.
Emily Blunt
La actriz de ’El diablo se viste de Prada’ se crió en un entorno bastante elitista: su padre era abogado y su madre era maestra. Sin embargo, se sentía frustrada por no desenvolverse hablando con la misma fluidez que sus progenitores. "Yo no heredé su oratoria, porque fui tartamuda hasta los 12 años. Tuve que hacer terapia del lenguaje y me comencé a liberar de mi problema interpretando a personajes con diferentes voces".
Tiger Woods
El golfista más golfo, valga la redundancia, reveló en el programa ’60 Minutes’ (CBS) que fue un niño tartamudo. "Las palabras se me perdían en alguna parte en el camino del cerebro a la boca", aseguraba Woods. En su caso, las sesiones de terapia fueron efectivas y es un buen exponente de que ’querer es poder’.
Julia Roberts y Marilyn Monroe.
Julia Roberts
La ’novia de América’ fue superando sus problemas de tartamudez a medida que se fue haciendo adulta. El hermano de Julia, Eric, sufría el mismo trastorno y ambos soportaron las burlas de sus compañeros en el colegio. Así recordaba él esta difícil etapa en una entrevista concedida a la revista de la Stuttering Foundation of America (Fundación Americana de la Tartamudez): "Me daba pánico leer en clase. Siempre memorizaba los párrafos. Pero me di cuenta de que lo más importante es aceptarnos como somos".
Marilyn Monroe
No podemos completar este repaso sin mencionar un caso muy llamativo, el de Marilyn Monroe. El icono de la sexualidad en los años cincuenta y sesenta, que estremeció a medio mundo cuando cantó el ’Cumpleaños feliz’ al presidente Kennedy, tartamudeó hasta que saltó al estrellato. En terapia, Marilyn aprendió una de las herramientas más importantes para afrontar el trastorno: la importancia de la respiración. Este descubrimiento se lo debemos a Lionel Logue, terapeuta del rey Jorge VI, a quien interpretaba en ’El discurso del rey’ Geoffrey Rush.
¿Sabíais que estos famosos eran tartamudos? ¿Por qué les cuesta tanto a los rostros conocidos reconocer este tipo de trastornos, mucho más comunes de lo que nos venden?
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